Life Is a Dream
Ridderens drøm eller liv er en drøm, et maleri af barokmaleren Antonio de Pereda udstillet på Academia de S. Fernando, Madrid .
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(c) Luis García, CC BY-SA 2.0
Livet er en drøm er et teaterstykke skrevet af Pedro Calderon de la Barca udgivet i 1635 i den spanske guldalder og tilhører den litterære del af barokken. Det centrale tema er menneskehedens frihed til at indrette sit liv uden at blive båret af en formodet skæbne.
Opfattelsen af livet som en drøm er meget gammel, der findes referencer i hinduistisk tænkning, persisk mystik, buddhistisk moral, den jødisk - kristne tradition og græsk filosofi. Derfor er det endda blevet betragtet som et litterært emne.
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Antonio de Pereda - El sueño del caballero - Google Art Project.jpg
La obra representa a un caballero del siglo XVII vestido con la indumentaria de la época y dormido mientras un ángel le muestra el carácter efímero de los placeres, las riquezas, los honores y la gloria. El ángel le muestra el jeroglífico de la fecha sobre el sol, que hiere, vuela raudo y mata. El conjunto de objetos situados sobre la mesa constituye un auténtico bodegón en el que se establece una condensación de símbolos y alegorías. Los símbolos de la mesa son muy complejos, pero destacan algunos por su presencia continua en todas las "vanitas": la calavera que simboliza la muerte, la máscara de teatro sobre la hipocresía, las joyas y el dinero que son las riquezas que no podemos llevar al otro mundo, la baraja y las armas como el juego y los placeres de la caza, el reloj que indica el paso inexorable del tiempo, la vela apagada que indica la extinción de la vida... son innumerables los objetos y los múltiples significados engarzados que podemos entresacar de todos ellos. El pintor ha representado un "corpus" de los objetos de la vanidad del mundo y de su sin sentido tratados con una definición magistral que los individualiza como forma de acentuar, a través de lo real, la presencia de su carácter didáctico, alegórico y moral.
La obra representa a un caballero del siglo XVII vestido con la indumentaria de la época y dormido mientras un ángel le muestra el carácter efímero de los placeres, las riquezas, los honores y la gloria. El ángel le muestra el jeroglífico de la fecha sobre el sol, que hiere, vuela raudo y mata. El conjunto de objetos situados sobre la mesa constituye un auténtico bodegón en el que se establece una condensación de símbolos y alegorías. Los símbolos de la mesa son muy complejos, pero destacan algunos por su presencia continua en todas las "vanitas": la calavera que simboliza la muerte, la máscara de teatro sobre la hipocresía, las joyas y el dinero que son las riquezas que no podemos llevar al otro mundo, la baraja y las armas como el juego y los placeres de la caza, el reloj que indica el paso inexorable del tiempo, la vela apagada que indica la extinción de la vida... son innumerables los objetos y los múltiples significados engarzados que podemos entresacar de todos ellos. El pintor ha representado un "corpus" de los objetos de la vanidad del mundo y de su sin sentido tratados con una definición magistral que los individualiza como forma de acentuar, a través de lo real, la presencia de su carácter didáctico, alegórico y moral.